Australia exterminará a 2 millones de gatos con cacerías y veneno

Más leídas

¿Quién podría matar un gato? “Nosotros, y a mucha honra”, te responderían estos días los miles de cazadores australianos a los que el Gobierno ha dado permiso para adentrarse en terrenos privados para exterminar a los felinos. La medida forma parte de un plan mayor anunciado en 2015 por el cual el país se comprometía a acabar con dos millones de gatos antes de 2020. Sólo consiguieron acabar con 210.000 gatos en el primer año de su implantación, por lo que las medidas (también cepos y venenos) se han intensificado.

Tiro al gato: hay periódicos nacionales que han exaltado el exterminio de los mininos publicando, por ejemplo, recetas de guisos con su carne. También en televisión se ha visto a cazadores disparando a plena luz del día a algunos de estos animales. Estas escenas chocan con el privilegiado y diferenciado lugar que ocupan los gatos en nuestro día a día, más como mascotas que como fieras salvajes.

Se han creado docenas de peticiones online con hasta 160 mil votos pidiendo la derogación de la norma australiana, personas en su mayoría foráneas que han visto en la medida del Gobierno un acto violento y desmedido. La actriz francesa Brigitte Bardot condenó la iniciativa en una carta abierta, el cantante británico Morrisey, que comparaba la situación con la vivida por el león Cecil, dijo que las autoridades habían “llevado la idiotez demasiado lejos’, y algunos usuarios realizaron ciberataques contra los cazadores que habían salido en la tele.

Existen grupos que presentan una tercera vía. Creen que la acción del Gobierno y de los cazadores autodenominados salvadores del medio ambiente se están equivocando. Al forzar y controlar el ecosistema sacando a los predadores sólo están interviniendo en la selección natural y debilitando a los animales autóctonos. Argumentan que, si el querido betong de Lesueur es una víctima perfecta para el gato, es por la obsesión local por mantener la comunidad en un estadio previo a la llegada de los colonos. En cualquier caso, están por ver los efectos de este mandato gubernamental. Quieren acabar con dos millones de gatitos. En las islas hay, que se sepa, al menos 20 millones, casi tantos como ciudadanos australianos.

Últimas noticias

La emotiva travesía de un gato que viajó 8 kilómetros para volver con el hombre que lo rescató

Descubre la increíble travesía de un gato llamado Max. Desde una granja Amish en Pensilvania hasta su regreso al hogar de su salvador.

Noticias relacionadas