No importa que sean unos de los animales mรกs nobles y bellos, compaรฑeros de los humanos desde hace milenios. No los salva tampoco que vivan en Francia, un paรญs con enorme pasiรณn por los deportes ecuestres. Desde hace unos meses, los caballos estรกn siendo vรญctimas de mรบltiples y crueles ataques, hasta ahora inexplicables. Decenas de ellos han muerto o sufrido salvajes mutilaciones. Todo son especulaciones sobre los motivos detrรกs de estas bรกrbaras acciones, que han causado indignaciรณn y han obligado al gobierno francรฉs a tomar cartas en el asunto.
El ministro del Interior, Gรฉrald Darmanin, y su colega de Agricultura, Julien Denormandie, se desplazaron a Plailly, en el departamento de Oise, al norte de Parรญs, para visitar una granja en la que un caballo muriรณ tras ser atacado, en julio pasado. Fue un gesto de solidaridad hacia un sector muy inquieto por lo que ocurre. Existe una autรฉntica psicosis en las cuadras. Algunos propietarios han instalado cรกmaras de seguridad. Otros realizan turnos, por la noche, para vigilar a los animales. Los mรกs exasperados organizaron controles en una carretera del departamento de Finisterre, en el extremo oeste de Bretaรฑa, con armas simuladas.
A algunos animales les han cortado las orejas o los genitales, sevicias que podrรญan obedecer a ritos satรกnicos
Desde principios de aรฑo ha habido decenas de casos, repartidos por el territorio, sobre todo en la mitad norte. En agosto la situaciรณn se agravรณ.
Estรกn abiertas mรกs de 150 investigaciones judiciales. Suelen ser ataques con cuchillo u otro utensilio muy afilados, quizรกs un bisturรญ. A algunos animales les mutilaron la oreja. A otros les arrancaron los ojos o les cortaron los genitales. A veces sufren largos y profundos cortes en el costado. Una parte de ellos han muerto degollados o โse sospechaโ por parada cardiorespiratoria por el trauma.
Ademรกs de caballos, han sido vรญctimas algunos asnos y una alpaca, un camรฉlido de la misma familia que la llama y cuyo pelo es muy apreciado en la industria textil.
La policรญa maneja diversas hipรณtesis. Podrรญan ser acciones de alguna secta con ritos satรกnicos. No se descarta que haya habido mimetismo. Hay quien ha aventurado que se trate de venganzas o chantajes en el medio ecuestre, que mueve mucho dinero. Son meras suposiciones sin confirmar.
Dรญas atrรกs se produjo la detenciรณn, en Alsacia, de un hombre de 50 aรฑos con antecedentes por trรกfico de estupefacientes y agresiones a animales en Alemania. Unas horas despuรฉs fue puesto en libertad porque pudo aportar una sรณlida coartada.
Darmanin exhortรณ โa la movilizaciรณn general del Estado y de los francesesโ para descubrir al autor o โprobablementeโ autores de las sevicias a los caballos. โNos hallamos ante un fenรณmeno en el que no comprendemos las reivindicacionesโ, agregรณ el ministro. Un dato clave y que aรฑade misterio es que, en efecto, nadie se ha atribuido estas agresiones. Darmanin pidiรณ a los propietarios de cuadras que no se tomen la justicia por su mano, pues serรญa โun drama dentro del dramaโ.
โUno no puede estar sino horrorizado ante los actos de crueldad que se multiplicanโ, denunciรณ el presidente de la Federaciรณn Francesa de Equitaciรณn, Serge Lecomte, e instรณ al sector a extremar la vigilancia โpara poner fin lo antes posible a estas atrocidadesโ.
Estos tristes sucesos estรกn teniendo mucha repercusiรณn porque Francia es un paรญs con gran sensibilidad hacia los caballos. La equitaciรณn es el tercer deporte en nรบmero de federados โsolo por detrรกs del fรบtbol y el tenisโ y el primero por lo que respecta a las mujeres. Hay casi 10.000 instalaciones ecuestres. El sector da empleo directo o indirecto a 180.000 personas. A esto se aรฑade la fuerte aficiรณn por las carreras de caballos. En Francia existen 230 hipรณdromos. Las apuestas ascienden a 9.000 millones de euros anuales. Al final del confinamiento, las carreras fueron autorizadas mientras que el fรบtbol hubo de esperar.
Al amor de los franceses por los caballos han contribuido experiencias como las de Peyo, un ejemplar de doma clรกsica con virtudes mรกgicas para confortar a los enfermos terminales. Su dueรฑo, el jinete Hassen Bouchakour, lo lleva desde hace aรฑos por los hospitales, y el caballo entra en las habitaciones.
Algunos expertos equinos, como el veterinario belga Tom Mariรซn, creen que entre los caballos y los hombres, por su estrecha relaciรณn ancestral, hay un vรญnculo genรฉtico que explicarรญa el afecto mutuo y la complementariedad. Estos argumentos aรฑaden aรบn mรกs estupor y rabia por lo que sucede en Francia.