Durante los últimos años han sido documentados y estudiados diversos casos de jirafas leucísticas, una alteración de origen genético que produce una falta permanente de la coloración (parecida pero no idéntica al albinismo).
Ahora, la zoóloga Zoe Muller, estudiante de doctorado en la Universidad de Bristol (Reino Unido) y fundadora del Giraffe Research Conservation Trust, describió ahora el primer caso de una jirafa que vive en el medio natural -en Kenia- aparentemente afectada de vitíligo, una enfermedad de la piel de carácter autoinmune, en la que los melanocitos (las células responsables de la pigmentación de la piel) son destruidos por el sistema inmunológico, dejando así de producir melanina y, por tanto, dando lugar a zonas de la piel con pérdida de pigmento.
El vitíligo (o vitiligo) afecta entre el 0,5 y el 3% de la población humana mundial y, según algunos medios, Michael Jackson padecía esta enfermedad que le provocaba falta de pigmentación en la piel. Este caso sería el primero conocido en jirafas en estado salvaje.