Según el reporte, el mercurio, clasificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como “una de las diez sustancias químicas que plantean mayor preocupación para la salud pública”, se estima que afectó negativamente la salud de más un millón y medio de personas en la región. Además, amenaza la salud y medios de vida de millones más. Ya que, la contaminación del aire y el agua y la intoxicación de plantas y animales lo intensifica.
La principal fuente de contaminación por mercurio en la Amazonía es la minería de oro artesanal y de pequeña escala.
Esta representa el 15% del oro extraído en la región. El mercurio es utilizado en el proceso de purificación del oro. Esto contribuye con el 71% del total de emisiones de mercurio cada año.
“Desafortunadamente, la crisis de la contaminación por mercurio en la Amazonía es ampliamente ignorada a pesar de la creciente evidencia de los peligros que representa para las personas y vida silvestre a lo largo del sistema fluvial” dijo Jordi Surkin, Director de la Unidad de Coordinación Amazónica de WW.