Una veintena de delfines muertos fue hallada en un sector del litoral georgiano del mar Negro, a unos 380 kilómetros al oeste de Tiflis.
‘Todo indica que los delfines murieron por morbillivirus’, declaró Archil Fuchmanidze, portavoz de la Agencia Nacional de Protección del Medioambiente.
El morbillivirus del delfín es altamente contagioso y ataca el sistema inmunitario de estos mamíferos, provocándoles diversas enfermedades que merman sus capacidades para nadar y mantenerse a flote.
Aunque no se ha demostrado que este virus pueda transmitirse a los seres humanos, Fuchmanidze llamó a la población a no tocar los delfines muertos que encuentren varados en el litoral como medida de precaución.