El parque acuático Inubosaki cerró en el mes de enero y los animales quedaron varados en la pileta de la ciudad costera.
La situación de Honey, un delfín hembra nariz de botella, como decenas de pingüinos de Humboldt y muchos peces y reptiles generó gran indignación en toda la comunidad.
Hasta el momento ex empleados alimentan a los animales, pero no se sabe cuanto tienen de reservas para darles de comer.