La fragmentación de los bosques expone a las especies animales, especialmente a los pequeños mamíferos autóctonos, a un mayor riesgo de extinción, según un estudio divulgado hoy en Australia.
“Esto puede tener consecuencias terribles para la biodiversidad”, dijo William Laurance, investigador de la Universidad James Cook de Australia y miembro del equipo internacional de científicos que realizó el estudio publicado en la revista Science.
La investigación se centró en analizar cuánto tiempo podían vivir las especies en los bosques fragmentados, que son el resultado de la división del bosque original en unidades más pequeñas y aisladas entre sí.
En el estudio, que abarca más de dos décadas, se observó cómo los pequeños mamíferos nativos están al borde de la extinción en las porciones aisladas de zona forestal que se crearon con la construcción de una gran reserva hídrica en Tailandia.
Los científicos notaron que ejemplares pequeños de la fauna autóctona desaparecían a gran velocidad y después de 25 años sobrevivía una media de menos de un ejemplar por cada bosque fragmentado, según un comunicado de la Universidad James Cook.
Los científicos recomendaron que se ponga fin a la fragmentación de bosques para proteger a las especies salvajes y asegurar la biodiversidad del planeta.
EFE