Locura animal y salvaje por parte de humanos contra centenares de perros inocentes en la ciudad de Necochea, triste escenario de sucesivas apariciones de canes descuartizados o de sus cueros. Semejante y macabra matanza, además recurrente, estaría vinculada a la comunidad china que se asienta en la localidad balnearia, que faena los perros para consumo personal, informaron a “Crónica” las sociedades protectoras de animales locales. Sin embargo, dichas organizaciones no descartan que los hallazgos estén relacionados con prácticas y rituales umbandas.
“Hay perros desaparecidos en cantidad”, revela Gloria Resuene, representante de la Sociedad Protectora de Animales “Aman Mascotas”, en referencia al terror que desde marzo se profundiza en la ciudad balnearia. Es que cadáveres de mascotas aparecen seccionados, sin las patas y cabeza, en la zona de Los Piletones y la Termoeléctrica de Necochea, en el puerto de Quequén. Justamente allí reside Ana María Cattaneo, del Centro de Ayuda al Animal de Necochea, que fue víctima de esta ola asesina de perros. “Hace seis meses desapareció mi perro. Luego fueron desapareciendo los demás de la zona, que yo misma les daba de comer”, relata la mujer.
En este sentido, Cattáneo cuenta que “nos sorprendió. Años atrás antes estaba esa maldita costumbre de que los subían a los barcos y los descuartizaban delante nuestro para comerlos. Pero ahora hay mucho control”. Sin embargo, con la difusión de las misteriosas desapariciones “comenzamos a recibir denuncias de que los cargaban en camionetas. Poco después encontramos al primer perro cuereado”.
Así se fueron incrementando los testimonios que precisaban la planificación y puesta en marcha de esta horrorosa práctica. Al respecto, Gloria Resuene detalló que “un hombre que salía de su casa y estaba por tomar un remís observó que adelante había una camioneta Ford blanca con un sujeto de nacionalidad china que subía con un perro cuereado”. No obstante, las denuncias más cruentas son las de un adolescente, de 14 años, quien se hallaba en la puerta de su vivienda con su mascota de raza cuba. En ese instante, dos sujetos descendieron de un rodado y le arrancaron el perro de los brazos. Por si fuera poco, una joven que se desempeñaba en un supermercado chino fue despedida al sorprender a dos de sus empleadores descuartizando a un can.
Es por ello que ambas mujeres vinculan la matanza con algún sector de la comunidad china que habita en Necochea, señalando que “la tradición alimenticia de ellos es comer perros. Principalmente les gusta la cabeza”, remarca Gloria.
El secuestro y la posterior matanza de los “perritos” ha sido vinculada por los denunciantes con la costumbre alimentaria de la comunidad china que reside en la ciudad. Sin embargo, no sólo se emplearía la carne de perro para el consumo oriental, sino también que se destina para rellenar embutidos y venderlos al público. “Estamos en un vale todo”, enfatiza al respecto la protectora Gloria Resuene.
Es por esta cualidad de la carne canina que también se ha comenzado a mezclar como relleno de chorizos, que luego son comercializados en establecimientos del rubro alimenticio a toda la población.
Crónica