Neuquén: Se lleva adelante la investigación sobre las causas de la muerte de al menos 23 cóndores

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Guarda faunas y moradores del paraje Pichi Neuquén sospechan que fue por comer carne de una vaca muerta, que habría sido envenenada por crianceros. 

Moradores del paraje Pichi Neuquén manifestaron su preocupación y denunciaron la muerte de al menos 23 cóndores, una decena de animales domésticos y silvestres que habrían consumido carne de una vaca envenenada.

Desde la regional Norte de Guarda Faunas reconocieron la situación y señalaron que la hipótesis más fuerte es la vertida por los vecinos, sin embargo advirtieron que se esperan informes de laboratorio que fueron solicitados a la fundación Cóndor Andino en Buenos Aires, para determinar si los animales estaban contaminados.
 
El episodio ocurrió hace dos semanas en el norte de la provincia de Neuquén y fue denunciado por crianceros, quienes manifestaron su preocupación por el uso de químicos en animales muertos. Advirtieron sobre la muerte de ocho especies de animales entre las que se encontraban perros, gatos, jotes y los cóndores.

En ese contexto explicaron que en el caso de los animales domésticos podrían implicar un riesgo para la salud de sus dueños y la contaminación de los ríos, ya que algunos fueron encontrados en cursos de agua.

Los denunciantes explicaron que la situación se detectó en el campo de un criancero donde había una vaca muerta a la que habrían contaminado con químicos para evitar que se pudra. Sin embargo desde Fauna informaron que esta práctica se realiza a menudo para matar pumas u otros animales silvestres que atacan el ganado.

La regional Norte de Guarda Faunas de Neuquén, corroboró que se encontraron seis cóndores muertos en un amplio radio. Se trataba de dos aves jóvenes y cuatro adultas, algunas de ellas estaban en avanzado estado de descomposición, por ese motivo solo pudieron recolectar muestras de tres para poder hacer los análisis correspondientes. Esperan que los informes definitivos lleguen en el transcurso de esta semana.
 
Señalaron además que tras el hallazgo de los cadáveres se procedió a su incineración y posterior entierro, para evitar que otros animales silvestres sigan alimentándose con carne contaminada.

Desde Fauna señalaron que un séptimo cóndor fue detectado el 13 de octubre en cercanías de la localidad de Manzano Amargo, pero que aún se encontraba con vida y fue rescatado con ayuda de la policía provincia. En ese caso corroboraron que el animal tenía una herida de bala calibre 22 en una de sus alas.
 
Solicitaron la asistencia de un veterinario de la localidad, Ariel Orellana, quien revisó al animal, le efectuó las curaciones y luego suturó la herida. El animal fue retenido por más de una semana y cuando su estado mejoró fue liberado nuevamente.

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