El manatí antillano, es una subespecie de manatí vulnerable a la extinción que se refugia en las aguas del Caribe. Gracias al uso de sonares, los científicos han detectado manatíes hasta en 1 mil ocasiones durante un año a lo largo de más de 2 mil kilómetros en un área protegida de Panamá. Las poblaciones de este mamífero marino se ven gravemente afectadas por el uso de redes de pesca y embarcaciones.
Actualmente, las tres especies de manatí que existen en el mundo se encuentran bajo amenazada de extinción. Entre las subespecies de este mamífero marino se encuentra el manatí antillano, localizado en ríos y humedales costeros desde el Golfo de México hasta Brasil, cuya población es muy poco conocida.
Según la Lista Roja de Especies Amenazadas, su situación es vulnerable ya que cuenta con menos de 2.500 ejemplares en el mundo y se cree que el 20% de la población podría desaparecer en las dos próximas décadas si no se aplican medidas eficaces para su conservación.
Debido a que estos individuos viven en aguas turbias e inaccesibles, la estimación de su población resulta complicada (registros históricos, avistamiento de aviones y barcos). Por ello, un grupo de científicos del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales ha utilizado una nueva técnica para el conteo basada en sonares.
‘Este estudio es el más completo de su tipo siendo esto vital para la supervivencia de esta especie vulnerable,’ afirmó Hector M. Guzmán, biólogo marino del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI), y uno de los autores del estudio.