Los patrones de colores tan brillantes de algunas especies han desconcertado a los científicos durante décadas. Hay especies en las que los colores parecen cumplir roles muy concretos, como el de actuar de disuasores frente a posibles depredadores.
Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad de Arizona (Estados Unidos) ha identificado un vínculo fuerte y consistente entre la función de los colores brillantes de los animales y los patrones de actividad de sus ancestros evolutivos.
El estudio, publicado en la revista Evolution, examinó todos los grupos principales de vertebrados terrestres: mamíferos, aves, anfibios, tortugas, serpientes…).
La clave
Los expertos encontraron que las especies que usan sus colores brillantes como señal sexual descienden de ancestros que estaban activos durante el día, mientras que aquellas que usan esos colores para disuadir a los depredadores tenían ancestros que estaban activos durante la noche.
“Este patrón generalmente parece mantenerse entre los vertebrados terrestres, un grupo con unas 40.000 especies que evolucionaron durante 350 millones de años”, comenta John Wiens, profesor de Ecología y Biología Evolutiva en la Universidad de Arizona y autor principal de la investigación.
“No importa cómo una especie produce los colores. La forma en que un pájaro se vuelve rojo es diferente de cómo un lagarto se vuelve rojo, pero este patrón general de actividad diurna y nocturna aún funciona”.
Parece que al principio de la evolución, la mayoría de los ancestros de las especies más actuales no presentaban este abanico llamativo de colores, sino que contaban con colores mucho más apagados.
Sin embargo, con el paso del tiempo y fruto de distintos linajes, la coloración les ayudó a sobrevivir y reproducirse, una característica que transmitieron genéticamente a las siguientes generaciones.
“Los rasgos que vemos hoy en las especies pueden ser el resultado de su historia evolutiva”, dijo el autor principal del estudio, Zachary Emberts.
“Estábamos buscando patrones evolutivos, así que hicimos dos análisis separados, uno que usó su actividad diurna y nocturna actual y otro que usó su actividad ancestral diurna y nocturna”.
Según el experto, la coloración nunca se utiliza para ambos propósitos: o sirve para advertir a los depredadores, o como señal sexual. Nunca ambas a la vez.
