Un virus emergente está afectando a las poblaciones de anfibios en Portugal, pero esta no es la primera vez que los anfibios causan preocupación en el país luso. En 2009, cientos de sapos parteros (Alytes obstetricans) fueron encontrados muertos en el Parque Natural de la Serra da Estrela.
Una investigación publicada en la revista Scientific Reports lanza una nueva alerta sobre este género de virus que también se ha detectado en España y Europa. “Los ranavirus se conocen desde hace tiempo, aunque en los últimos años la globalización está disparando las mortalidades masivas en todo el mundo y, además, nuevas cepas siguen llegando, probablemente, desde Asia”, declara a Sinc Jaime Bosch, investigador del Museo Nacional de Ciencias Naturales y coautor del estudio.
El hecho de que estos virus afecten también a peces y reptiles complica enormemente la situación, tanto por su facilidad de dispersión, como por su permanencia en el medio, incluso después de que los anfibios desaparezcan.
“Han infectado a poblaciones de anfibios de España desde hace, probablemente, varias décadas. En 1992 descubrimos el que sería el primer caso conocido en nuestro país aunque en ese momento ni siquiera sabíamos exactamente qué organismo era el causante del problema”, añade el científico.
En el otoño de 2011 surgió otro extraño episodio de mortalidad en la Serra da Estrela que no solo afectó a los sapos parteros, sino también a todas las otras especies de anfibios del parque. El episodio contrastaba con todos los patrones de mortalidad previamente asociados con la quitridomicosis en la península ibérica y Europa.
Las pruebas realizadas con los animales muertos confirmaron que no solo existía una infección por hongos quítridios. Se detectó entonces la nueva cepa de ranavirus en todas las especies analizadas.