Investigadores de la Universidad de Oregon revelaron que los gatos se sienten inseguros cuando dejan de ver a sus dueños, ya que sienten un gran apego hacia ellos.
A pesar de que son comúnmente asociados a ser animales menos apegados a las personas que los perros, también extrañan a sus dueños, quienes ven cómo sus “padres”.
Otro ensayo reveló también que los gatos tienen conocimiento respecto a cómo manipular a sus dueños, y en qué momento es conveniente maullar y por qué, y no solo esto: tienen diversos tonos que utilizan de acuerdo a la urgencia de lo que piden.
Para llevar a cabo esta investigación, colocaban a los felinos en una habitación con sus “amos” o personas a cargo durante dos minutos, para luego separarlos la misma cantidad de minutos, y allí es donde detectaron en los animales ansiedad y apego.
El 65% de los gatos mostró un apego muy grande con los humanos, un porcentaje similar al que expresaron con sus padres biológicos.
Además, encontraron distintas formas de reacciones cuando sus amos regresaban: mientras que el 60% tenía mucho apego hacia sus humanos que volvían, el 30 % se alejaba o estaba enojado, demostrando que seguía estresado o que estaba enojado.
Los veterinarios e investigadores con frecuencia describen a los gatos como difíciles de descifrar o comprender. Cuando un gato ronronea por lo general se vincula a su felicidad mientras que cuando tiene las orejas hacia atrás o está silbante, que no está feliz.