En Tailandia, una ONG ha emprendido una campaña para acabar con la explotación de los elefantes en muchas ciudades del país donde son utilizados por sus dueños para pedir limosna.
La Fundación Amigos del Elefante Asiático espera recoger 20.000 firmas para elevar la petición a la primera ministra, Yingluck Shinawatra, a la que pide que tome medidas para acabar con esta práctica, según un diario del país.
La secretaria general de la fundación, Soraida Salwala, recordó que su organización ha trabajado para acabar con la explotación urbana de estos animales desde 1995, pero las autoridades no han respondido para frenar el abuso.
Mientras que en los últimos años ya no se ven por las calles de Bangkok, los paquidermos son una imagen habitual en otras ciudades turísticas como Chiang Mai o Ayutthaya.
Sus dueños cobran a los locales o turistas extranjeros por alimentar a los elefantes con plátanos o caña de azúcar o tomarse fotos con los animales.
Soraida relató que el hospital de su fundación en la provincia de Lampang, en el norte, ha tratado en los últimos 21 años a más de 3.000 ejemplares y actualmente tiene a seis bajo tratamiento.
En Tailandia hay unos 3.000 elefantes domésticos y otros 3.000 en estado salvaje, cuando se estima que en 1850 había 100.000 en el entonces Reino de Siam, según el Centro de Conservación de Elefantes