En los últimos días, se lanzaron al mercado los nuevos bidets portátiles que están pensados para personas “con un estilo de vida saludable y respetuosos con el medio ambiente”. Se espera que estos dispositivos revolucionen la escena, por su adaptabilidad a los tiempos modernos, ya que ahorran más de 6.500 litros anuales de agua y energía.
Este aparato tiene dos tanques internos para 100 mililitros de agua en cada uno, que pueden ser administrados en forma de spray con dos intensidades. Esta cantidad sirve para chorros de entre 24 y 40 segundos, tal vez capaces de limpiar en profundidad.
Lo primero que llama la atención de estos bidets portátiles es su tamaño y diseño minimalista y discreto. Pero además está fabricado con materiales durables. El Sonny es una co-creación del estudio Box Clever.
El dispositivo cuenta con batería para tres semanas de uso, es bastante simple y sus cabezales son intercambiables. Con componentes antibacteriales y uso regular, ahorra más de 6.500 litros de agua al año, un manantial.
Uno de los creadores de este aparato defiende su uso por sobre el papel higiénico. “El papel higiénico mueve la materia, no la limpia… Si no, ¿por qué usamos toallas para secarnos luego de la ducha y no papel?”, preguntó.
Sonny no es el único bidet innovador en el mercado, sino que varias compañías buscan competir en este rubro.