Un nuevo estudio sugiere que el ruido del tráfico está asociada a una mayor tasa de pérdida de los telómeros en los pinzones cebra que han abandonado el nido. Los telómeros son los extremos de los cromosomas que protegen a los genes del daño y su acortamiento indica un envejecimiento biológico acelerado.
La investigación sugiere que únicamente el ruido urbano, como la contaminación lumínica o la contaminación química, está asociado con una mayor pérdida de telómeros y contribuye al envejecimiento en los pinzones cebra.
El envejecimiento celular es algo que puede no tener un impacto muy visible, su estudio indica que aunque las aves parecen estar adaptándose a la vida en ciudades ruidosas, las etapas de desarrollo de las aves cuando se estudian los efectos de la urbanización, ya que los mecanismos por los cuales los cambios en el hábitat inducidos por el hombre pueden afectar a los individuos pueden cambiar a lo largo de su vida.
Estas aves pueden ser menos sensibles al ruido mientras se encuentran en el nido, y las aves parentales pueden realizar cambios de comportamiento para proteger a la cría de los efectos negativos de la exposición al ruido.
Los investigadores evaluaron el impacto al ruido de tráfico en un total de 263 aves comparando las longitudes de los telómeros a los 21 y 120 días después de la eclosión bajo tres condiciones diferentes.
Los investigadores recogieron muestras de sangre para cada ave descendiente a los 21 y 120 días después de la eclosión para medir la longitud de los telómeros y la tasa de pérdida de telómeros, hallando sus principales resultados.