Una investigación, realizada por la NASA, ha detectado que ciertas plantas no sólo humedecen el aire, sino que también eliminan eficazmente el benceno, el formaldehído, el tricloroetileno, el xileno y el amoníaco.
A pesar de que el Doctor Bill Wolverton dirigió el estudio en el año 1989, en la actualidad sus resultados son los más precisos y completos.
Estas plantas son campeones verdaderos para eliminar del aire una variedad de toxinas. Así, durante las investigaciones se constató que las mejores plantas de interior para la purificación del aire son el crisantemo y la flor de muerto.
Es necesario destacar que la eficiencia de las plantas en la eliminación de los contaminantes del aire aumenta, si se añade un poco de carbón activado a la tierra. La NASA también recomienda tener al menos una planta por cada 10 metros cuadrados.