Cada vez son más las personas que optan por un cambio en su alimentación y deciden ser veganos. Reemplazan la carne y los lácteos con diversas alternativas vegetales que le brindan los nutrientes necesarios para una dieta equilibrada.
Si bien llevar adelante el estilo de vida vegana es un tanto dificultoso a la hora de conseguir alimentos aptos, ellos se las ingenian y algunos ya tienen un máster en cocina sin productos animales.
Pero el gran problema aparece cuando un vegano no está en su casa o pasa largas horas afuera. Si bien cada vez hay más locales que ofrecen una opción vegana tanto en productos dulces o salados, no siempre están ‘a la vuelta de la esquina’.
Para eso, manejan un mapa virtual (mapa vegano) en el que tienen seleccionados los productos comerciales que pueden consumir y hasta una guía de bares, restós y dietéticas donde pueden comprar alimentos o almorzar, cenar, merendar. Pero eso no es suficiente. La comunidad vegana va por más y quiere instalarse socialmente y hasta tener una ley que los ampare y reconozca.
Los veganos quieren su propio menú y que sea obligatorio en lugares públicos para que nunca más uno de ellos termine almorzando manzana porque no encuentra dónde comprarse el plato de comida apto.
‘Menu Vegano’ es un proyecto de ley que ya obtuvo media sanción en el Senado y fue impulsado por la legisladora Magdalena Odarda junto a Animal Libre y otras asociaciones en defensa de los animales.
La propuesta tiene el objetivo de impulsar una opción vegana en los menús que se ofrecen en instituciones públicas y que el Estado Nacional sea el garante.
Con esta propuesta, que ya tomó debate parlamentario, se busca que en aquellos lugares donde el Estado provee alimentación como lo son los colegios, hospitales o cárceles, entre otros, se garantice también una alternativa vegana, que permita el acceso a sus alimentos a todas las personas, sin importar sus convicciones éticas.