La gran amplitud geográfica que tiene la Argentina hace que también tenga una amplísima biodiversidad, con una gran variedad de especies, muchas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Por eso, se puso en marcha el programa Extinción Cero, que consiste en una serie de acciones concretas en pos de la conservación de especies autóctonas en estado crítico de extinción distribuidas en diversos ecosistemas del país.
El programa, que cuenta con un presupuesto inicial de 60 millones de pesos, pondrá en marcha medidas concretas para siete especies autóctonas en estado crítico de extinción. Estas son: el cauquén colorado, el cardenal amarillo, el macá tobiano, el yaguareté, el venado de las pampas, la ranita del Pehuenche y la mojarra desnuda.
El anuncio estuvo a cargo del ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, quien explicó que este programa ‘forma parte de todos los planes vinculados a la biodiversidad y la preservación. Precisamente, con la preservación está el cuidado de las especies, y Extinción Cero implica darle prioridad, en esta etapa, a las primeras siete especies seleccionadas y luego ampliaremos a 10, de una lista de 100 especies’ en estado crítico.
Para establecer los criterios de selección se tuvieron en cuenta el estado de conservación de cada una de estas especies y su situación crítica con el objetivo de realizar acciones de impacto positivo a corto y mediano plazo.
‘En las siete especies seleccionadas para esta primera etapa hay algunas que están amenazadas por la caza furtiva, por el comercio ilegal, otras tienen problemas con especies exóticas invasoras, y para cada una de ellas hay un abordaje diferente’, explicó Diego Moreno, secretario de Política Ambiental.
‘Hay 30 organismos diferentes que vamos a estar trabajando para preservar a cada una de estas especies. Por ejemplo, en lo que es el control de tráfico de especies estamos trabajando con el Ministerio de Seguridad para capacitar al personal sobre esta problemática y cómo controlar las fronteras. Lo mismo con las provincias para controlar el movimiento interno de especies en peligro’, agregó.