Un centenar de alumnos participaron de una experiencia de plantación de árboles nativos con el objetivo de restaurar un área incendiada en 2013, en el cerro Otto.
Esta iniciativa es parte del Programa Sostenido de Reforestación Educativa, llevado adelante por el Servicio Forestal Andino junto a la Universidad de Río Negro.
En esta primer oportunidad fueron convocados alumnos de tercer y cuarto año de los colegios Qmark, Secundario Waldorf Bariloche y Woodville, quienes coordinados por profesores y estudiantes avanzados de la Tecnicatura en Viveros de la UNRN, plantaron especies nativas propias del sitio incendiado, y otras con fines experimentales como Lengas, Ñires, Ciprés, Retamo, Pañil, Laura y Maqui.
La actividad tuvo primero un desarrollo teórico en el aula, donde se abordaron conceptos como la importancia del bosque como regulador del agua, la degradación que deja el paso de un incendio forestal y, la capacidad de recuperación de los ecosistemas locales, entre otros tópicos.
Esta experiencia, la primera desarrollada por el Servicio Forestal de Bariloche, dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, será el puntapié inicial para realizar actividades similares con otras instituciones educativas de la región.