Como el lugar de nacimiento del FSC, México ocupa un lugar especial en su corazón y en su historia. En 1994, el Secretariado del FSC abrió sus puertas en Oaxaca con solo tres empleados. En 2003, el FSC reubicó su sede a Bonn, Alemania. Actualmente, la organización se ha ampliado para convertirse en una entidad reconocida mundialmente con 355 empleados en 50 oficinas en cinco continentes.
Hoy, el FSC celebra este acontecimiento importante en Cancún, México, donde actores sociales, incluyendo miembros del FSC, estarán presentes para la ocasión.
“El FSC tiene mucho que celebrar. Hemos crecido para convertirnos en la solución más confiable del mundo para el manejo forestal sostenible. Cuestiones tales como la crisis climática y una disminución de la biodiversidad en los bosques del mundo se están volviendo más apremiantes y el FSC está más comprometido que nunca en trabajar con otros para ofrecer soluciones a esos desafíos. Nuestros primeros 25 años son los escalones para los próximos 25 años de trabajo para asegurar que los bosques permanezcan para las generaciones que vienen,” señaló Kim Carstensen, Director General del FSC.
A escala global, alrededor de 200 millones de hectáreas de bosques están certificadas por FSC. Al lograr esto, el FSC ha creado un nuevo paradigma para la participación de actores sociales en el manejo forestal. “A través de nuestro sistema de toma de decisiones es como hemos logrado reunir diversos intereses sociales, ambientales y económicos, para definir lo que significa el manejo forestal responsable y ningún grupo de interés puede derrotar a los demás. Esta es la esencia del FSC: ningún otro grupo del mundo entero puede hacer eso,” expresó Carstensen.
En el transcurso de los años, muchas innovaciones FSC habían influido considerablemente en la manera en que se manejaban los bosques. Esta influencia fue más allá de las áreas certificadas FSC.
Carstensen brindó dos ejemplos:
• El FSC desarrolló el concepto de bosques de alto valor de conservación que ahora usan muchos actores, incluso ajenos al sector silvícola. Este concepto tiene un impacto positivo para la protección ambiental y los beneficios sociales en muchas áreas, por ejemplo, aquellas que se utilizan para productos básicos agrícolas.
• La madera controlada, el sello del FSC de madera de riesgo bajo pero no certificada, se había convertido en la norma de facto de la industria del sector silvícola. Ahora que ya contamos con un estándar de madera controlada más sólido, el FSC podría usarlo como un trampolín para un vigoroso impulso que haga que la certificación FSC plena se convierta en la norma.
Los planes a futuro
A futuro, el FSC planea seguir mejorando el acceso a la certificación para pequeños propietarios forestales y comunidades y ampliar todavía más la cantidad de área certificada en los bosques tropicales como una contribución dirigida a asegurar estos bosques para las generaciones futuras.
Además, el FSC continuaría usando la tecnología para fortalecer la integridad de su cadena de suministro.