Por 15 años más, Perú seguirá libre de transgénicos por decisión del Congreso que acaba de aprobar una extensión de la moratoria para la introducción de este tipo de cultivos.
Entre los principales argumentos para esta extensión fue el reconocimiento de la gran agrobiodiversidad peruana y de los campesinos que sustentan la alimentación del pueblo peruano. El derecho a una alimentación sana fue otro de los argumentos presentados por los legisladores.
La impresionante votación de 104 a favor, 7 abstenciones y 0 en contra, fue el resultado del trabajo de sensibilización realizado por una gran cantidad de organizaciones campesinas, de productores agroecológicos y orgánicos, pueblos indígenas, ecologistas, de desarrollo rural, que desde hace meses han estado creando las condiciones para conseguir este histórico resultado.
Las organizaciones han mantenido talleres (virtuales debido a la pandemia) en las distintas regiones del país, con el fin de generar conciencia en la comunidad sobre los peligros de los cultivos transgénicos, y la importancia de la conservación de la agrobiodiversidad de este país Andino, centro de origen y diversidad de importantes cultivos, como es la papa, la quínoa, una gran cantidad de tubérculos andinos y frutas amazónicas.
Las organizaciones tuvieron que hacer frente a una fuerte arremetida de científicos cercanos a la industria, que descalificaron a quienes promovían un Perú Libre de Transgénicos como anticientíficos y antiprogreso.