Los dueños de un taller de carrocería y pintura que operaba a cielo abierto en la vía pública han sido condenados a tres años de prisión por la primera sentencia por contaminación atmosférica que se dicta en República Dominicana.
El Primer Tribunal Colegiado de Santo Domingo además de esta sentencia por contaminación atmosférica ha condenado también a los propietarios del taller por contaminación acústica, la segunda de esta materia que se emite en el país.
El Ministerio Público inició la investigación tras recibir la denuncia, remitida por el Ayuntamiento de Santo Domingo Este, donde varias personas se quejaban por el olor a pintura, el ruido y la contaminación que emitía el taller que operaba frente a sus residencias, informó la Procuraduría en un comunicado.