A España le cuesta arrancar con la producción de vino ecológico, debido a una incipiente demanda en el consumo, pero las nuevas tendencias en la forma de entender la calidad del vino hacen que este sistema sea un reto de futuro para el sector más allá de ‘un mero instrumento de marketing’.
Así lo ha constatado el enólogo y responsable de la Bodega Institucional del Gobierno de La Rioja, Juan Bautista Chavarri, quien trabaja en este sistema de producción desde finales de la década de los 80 y está considerado un referente nacional en la vitivinicultura ecológica y sus líneas de investigación.
España es el mayor productor de vino ecológico de Europa con una superficie vitícola de más de 81 mil hectáreas certificadas, más de 500 operadores y unas 400 bodegas que, al menos, tienen una referencia de vino ecológico, según datos del Ministerio de Agricultura.
Sin embargo, la demanda interna continúa siendo ‘muy pequeña’, lo que hace que la mayor parte de la producción se exporte y ello genera un desequilibrio comercial que el sector debe replantearse, reflexiona este enólogo e investigador.
Como contrapunto, la tendencia mundial en el consumo de vino va hacia la producción sostenible y la viticultura ecológica y, más allá de concebirse como una mera serie de normas a cumplir, es vista por el consumidor como una forma intrínseca de entender la vida.
FUENTE: Eleconomista.es