Alex Salmond, Primer Ministro de Escocia, apoya la interconexión “supergrid” del Mar del Norte. Con este proyecto, se asegura de que una o varias fábricas de producción y de ensamblaje de las M5000 serán instaladas cerca del estuario de Forth. Busca tomar ventaja desde ahora y antes de que lo haga Inglaterra, de un eslabón de la cadena de aprovisionamiento de las energías marinas renovables del Reino Unido.
Forma parte de una estrategia global. En la hipótesis donde el país obtenga la independencia después del próximo referéndum que tendrá lugar hacia fines del 2014, el delinea una economía que integra las energías renovables del mar como corazón de un sistema mix energético que pondrá a Escocia en el sexto puesto de los países más ricos.
Pero esto también implica realizar una transición energética progresiva con la transferencia de empleos del offshore hacia las ERM. Escocia posee alrededor de un 90% de las reservas petroleras y de gas de Europa y según AREVA, las costas escocesas representan un 25% del mercado europeo de la energía eólica marina que deberá sobrepasar los 50 GW en 2030, el equivalente a 25 reactores nucleares.
La energía eólica offshore, la energía de las olas y de las mareas, constituyen un recurso predictivo e inagotable el cual el país podría exportar hacia el sur de Inglaterra y más allá gracias a una transmisión y a un almacenamiento adecuados.
La unidad y homogeneidad del sitio de la futura fábrica escocesa serán una ventaja. De igual forma lo será para la creación de tres fábricas previstas en Havre, Francia, en el cuadro de las obligaciones de atribución definitiva del parque eólico offshore de Saint-Brieuc a Ailes Marines SAS sobre el muelle Joannes Couvert.
Luc Oursel declaró que este protocolo “muestra el compromiso del grupo a contribuir al desarrollo de una industria eólica offshore ambiciosa en el Reino Unido”.
La firma del Protocolo contó también con la presencia del presidente y vicepresidente de AREVA UK Desmond Cecil y Alain-Pierre Raynaud. AREVA no es la primera empresa de ERM a instalarse en Escocia. Mitsubishi desarrolla un centro de ingeniería en Edimburgo y Gamesa implantó un un centro de investigación y desarrollo en Glasgow.
En materia de energías renovables, poseer un cuarto del potencial europeo de la energía marina, para un país que representa sólo el 1% de la población europea, es una ventaja sustancial en el mundo moderno.
