La Junta de Supervisores de San Bernardino, el condado más extenso de California, aprobó una resolución que restringe la construcción de plantas de “energía verde” en áreas rurales, alegando el bienestar de sus residentes.
Los supervisores respaldaron las recomendaciones de la Comisión de Planeamiento del condado al prohibir la construcción de proyectos de energía solar o de viento a gran escala en los distritos considerados rurales, así como en cerca de una docena de otras comunidades.
“Nuestro primer interés es el cuidado la vida, los terrenos y las propiedades de nuestro residentes, especialmente en áreas rurales“, dijo Terri Rahhal, directora de Servicios de Uso de la Tierra del condado.