Ambas centrales se encuentran emplazadas dentro del Complejo Ambiental Norte III localizado en tierras de Campo de Mayo, en parte de los municipios de San Martin, San Miguel y Tigre.
La denominada Central San Miguel, ubicada en el partido de San Miguel, utiliza como insumo energético el biogas del módulo Norte IIIC. Esta planta tiene una capacidad instalada de 11,796 MW. El equipamiento de generación de energía eléctrica está constituido por 6 unidades impulsadas por motores alternativos de combustión interna alimentados con biogás proveniente del Relleno Sanitario (Módulo Norte IIIc), el cual es suministrado en cantidad suficiente para hacer funcionar la totalidad de los generadores y garantizar el pleno despacho de la central. Los generadores están vinculados eléctricamente a la red de 13.2 kV de la empresa distribuidora EDENOR.
La denominada Central San Martín, ubicada en el partido de San Martin, utiliza como insumo energético el biogas del módulo Norte IIIA. Tiene una capacidad instalada de 7,1 MW. El equipamiento de generación de energía eléctrica está constituido por 5 unidades impulsadas por motores alternativos de combustión interna alimentados con biogas proveniente del Relleno Sanitario (Módulo Norte IIIc), y al igual que en el caso anterior están vinculados eléctricamente a la red de 13.2 kV de la empresa distribuidora EDENOR.
Las centrales para su operación cuentan con un sistema de succión e impulsión de biogas conformado por varios sopladores con motor eléctrico trifásico. Estos sopladores son los encargados de realizar la succión necesaria en todo el sistema de tuberías colectoras y transportar el flujo de biogás recolectado por el sistema, desde los pozos de extracción ubicados en el módulo hasta la estación de captación y pretratamiento, en la cual se le extrae el líquido residual que pudo haber sido arrastrado por el biogas.
El biogas, una vez capturado y pretratado, es enviado como combustible para alimentar los motogeneradores de cada una de las centrales térmicas, y el excedente de dicha alimentación, en caso de existir, se trata mediante la incineración controlada en antorchas de llama oculta según lo establece el Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kioto.
El biogas que se utiliza para la generación eléctrica, es tratado de manera de garantizar los requisitos de calidad necesarios para la correcta operación y mantenimiento del sistema de generación.