El Municipio de Rojas dio un paso muy importante pensando en el futuro productivo del distrito.
Se realizó allí el acto de apertura de sobres correspondiente al programa Renovar II para adjudicar la construcción distintas plantas productoras de energías renovables, siendo Biomasa Rojas S.A. una de las empresas adjudicadas. En otras palabras, Rojas tendrá una planta de generación de biomasa que podrá a la vanguardia al municipio.
El intendente Claudio Rossi y Eduardo Julián, en representación del Consejo de Clyfer, dieron la buena noticia a la sociedad.
El jefe comunal de Rojas explicó que desde hace poco más de un año se trabaja en un proyecto ambicioso que tiene como meta construir una de las dos primeras plantas de biomasa de todo el país. En la licitación Renovar ronda 2 se presentó este proyecto de generación de energía a partir de biomasa de maíz que entregará a la red 7 megavatios de potencia eléctrica.
Éste es un desarrollo único en lo que respecta a la combustión por caldera de la biomasa del marlo y la chala que no solo reducirá el impacto ambiental, sino que también generará nuevos puestos de trabajo; primero, en etapa de construcción de la planta, luego, en lo que será el funcionamiento, con unos treinta empleados y también lo que estará vinculado al mantenimiento.
Rossi explicó parte del proceso en el que se trabajó desde el Municipio para que todo llegue a buen puerto y contó que en octubre se recibieron y presentaron las ofertas del programa del Ministerio de Energía de la Nación; y luego de haberse vendido 117 pliegos licitatorios, se presentaron 228 ofertas por un total de 9.401,7 MW, casi 8 veces más de los 1.200 MW de potencia requerida inicialmente de tecnologías Eólica, Solar Fotovoltaica, Biomasa, Biogás, Pequeños Aprovechamientos Hidroeléctricos y Biogás de Relleno Sanitario, distribuidas en 21 provincias del país.
Biomasa S.A. es la fusión de la compañía BAS Projects Corporation, Global Dominion Access, ADBlick Agro y Clyfer.
La planta funcionará, siendo su motor principal, con el acopio de los residuos que deja el procesamiento del maíz para transformarlos en energía. El hecho marcará un antes y un después en la región, no solo en el aspecto productivo sino también en el ambiental porque es un acontecimiento sin precedentes en la historia del distrito, y que le dará una posición de privilegio en el mapa de la provincia de Buenos Aires.