En un potente reclamo colectivo, organizaciones ambientalistas de todo el país solicitaron la revisión del artículo 16 del Proyecto de Ley Presupuesto General de 2017 que asigna sólo el 3,8% de los recursos necesarios para dar cumplimiento al Fondo previsto por la Ley de Bosques.
Se trata de la peor asignación presupuestaria para la conservación de los bosques nativos desde que se conformó el fondo de protección en 2010. Es leído como un fuerte retroceso en materia de política ambiental.
La propuesta del Poder Ejecutivo le asigna al fondo de la Ley de Bosques sólo 270 millones de pess cuando, según los denunciantes, debería otorgarle no menos de 7 mil millones de pesos. Los bosques nativos están en proceso de degradación por deforestación: desde 1990 se perdieron 7,6 millones de hectáreas, un espacio similar a toda la provincia de Formosa.
La Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativo siempre tuvo palos en la rueda. Nació en 2007 pero fue reglamentada dos años más tarde. Establece que las provincias deberán realizar el ordenamiento territorial de sus bosques para regular el uso del suelo y proteger el medio ambiente.
‘La Ley cumple en 2017 diez años y su marcada desfinanciación supone una situación de extrema gravedad’, señala un comunicado emitido por varias ONG.
‘Hoy los legisladores tienen la posibilidad de cambiar esta situación a favor de los bosques nativos, de las especies silvestres que en ellos habitan y sobre todo a favor de las comunidades que dependen de los bosques para satisfacer sus necesidades y lograr un desarrollo sustentable’, afirmó Manuel Jaramillo, Director de la Fundación Vida Silvestre.