Una fina aunque intensa nube de cenizas, con un fuerte olor a azufre, cubrió desde anoche a varias localidades patagónicas y reavivó el recuerdo de las penurias sufridas en junio de 2011 con la erupción del Puyehue-Cordón Caulle.
“Hace cuatro años todos pusimos el hombro y la energía para salir adelante, ahora les pido lo mismo a todos, vamos a contribuir para salir adelante”, expresó la intendenta de Bariloche, María Eugenia Martini en conferencia de prensa.
La jefa comunal pidió racionalidad y calma a los vecinos de la ciudad rionegrina y anunció que inspectores de la Oficina de Defensa del Consumidor recorrerán comercios y supermercados para controlar que se mantengan los precios de los productos.
La Intendencia ya repartió 10 mil mascarillas que impiden el ingreso de las cenizas a las vías respiratorias entre las juntas vecinales de la ciudad, aunque la recomendación a la población es que salgan de las casas solamente si es necesario.
Las clases fueron suspendidas en todos los niveles, al igual que actividades en general, y aunque se cancelaron los vuelos, es totalmente normal la calidad del agua y el transporte público de pasajeros.
Fuente: Telam