Los expertos meteorológicos de la ONU, haciéndose eco de los llamamientos del Gobierno de Australia, han pedido a la población que extreme el cuidado ante los graves incendios catastróficos que sufren en el este del país y que ya han dejado al menos tres víctimas mortales.
“Además de la amenaza física inmediata, cuando las autoridades emiten un mensaje de peligro de incendios catastróficos, el mensaje básicamente es: “Sal, aléjate “, explicó a los periodistas Clare Nullis, portavoz de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
La Oficina de Meteorología de Australia define la situación como “en evolución y peligrosa”, y Nullis añadió que las condiciones probablemente seguirán siendo secas, con poco o ningún pronóstico de lluvia. “Los incendios se deben a una combinación de factores que incluyen baja humedad del suelo, calor y, lo que es más importante, dirección y velocidad del viento”, explicó.
Nueva Gales del Sur ha declarado la emergencia ya que partes del estado, incluyendo el área metropolitana de Sydney y Queensland, enfrentan un peligro de incendios “catastróficos”, el nivel más alto nivel de advertencia. “Catastrófico no es una palabra que los servicios meteorológicos utilicen a la ligera”, decía la portavoz que pedía a la población que abandone esas áreas.
Aunque los incendios forestales y de pastos son comunes en Australia, cada vez son más graves por el aumento de las temperaturas.