Cada vez se destina menos recursos públicos a la protección de los bosques Argentinos ante la amenaza de incendios forestales. A esa conclusión llega el informe Monitor Ambiental del Presupuesto, que, reporta una caída de 81% en la ejecución presupuestal del Servicio del Manejo del Fuego en 2024 respecto a 2023.
Si bien el presupuesto asignado para esta área del Gobierno Nacional (encargada de controlar los incendios) pasó de los $12.101 millones a los $33.142 millones, durante 2024 apenas se ejecutaron $7.739 millones, es decir sólo el 22% del total.
Esto significa una subejecución comparado con el 2023 cuando se utilizó el 99,9% del presupuesto. “Representa una caída real del 81%”, refieren desde la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), la organización que realizó el monitoreo.

¿Cuál es el control y manejo de los incendios?
El Servicio del Manejo del Fuego es el organismo estatal encargado de coordinar los recursos y acciones para el combate de incendios forestales en todo el país. En diciembre pasado, esta sección fue traspasada de la Subsecretaría de Ambiente al Ministerio de Seguridad.
Para FARN, este traslado se manifiesta en el cambio de enfoque para abordar la problemática de los incendios. Los especialistas describen que la política implementada por el Gobierno ha sido reactiva y no preventiva. “Es urgente un enfoque preventivo en la gestión del fuego. La reacción tardía y la falta de ejecución presupuestaria ponen en riesgo vidas humanas, ecosistemas y bienes materiales”, explican en el informe.
En medio de esta disminución en la inversión, los incendios se siguen propagando en los bosques argentinos. El último reporte mensual del Servicio del Manejo del Fuego muestra que en marzo de este año se quemaron 70.900 hectáreas de bosques, casi cinco veces más que lo registrado el mismo mes de 2024 (13.900 hectáreas).
Según las revisiones de FARN, en el arranque de 2025 ya se mostró ese comportamiento reactivo. El presupuesto empezó a ejecutarse recién en febrero, cuando los reportes de incendios en la Patagonia ya tenían más de un mes.

¿Quiénes encienden las llamas?
El 95% de los incendios forestales en Argentina son producidos por la mano del hombre, según datos del Servicio del Manejo del Fuego.
Las llamas pueden iniciarse por fogatas, colillas de cigarrillos mal apagados, la preparación de áreas de pastoreo con fuego, el abandono de tierras, el desarrollo agropecuario e inmobiliario, las actividades mineras, entre otros.
En muchos casos estas situaciones pueden ser premeditadas o tener alguna intencionalidad. Eso es lo que encontró el equipo de Parques Nacionales al investigar los incendios ocurridos entre diciembre de 2023 y febrero de este año en la región patagónica. “Tuvimos varios focos de incendio, relevamos el 95% y solamente uno fue por causas naturales”, reveló Cristian Larsen, presidente del directorio de la Administración de Parques Nacionales (APN).
El factor climático debe tenerse en cuenta. El cambio climático -expresado en sequías prolongadas y olas de calor- aumenta la frecuencia e intensidad de los incendios forestales. Al facilitar la propagación del fuego, se torna más difícil la contención y control de los incendios.
Un estudio realizado por científicos de Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) analizó 20 años de ocurrencia de incendios en las Sierras de Córdoba y encontró que los años más afectados por incendios fueron aquellos donde hubo mayor déficit hídrico.
Qué impactos tienen
El desfinanciamiento del sector ambiental durante el 2024 se evidenció también en otras dependencias. Por ejemplo, la Subsecretaría de Ambiente sufrió un ajuste presupuestario del 79,4% en términos reales, teniendo que operar con menos de una cuarta parte de los fondos utilizados en 2023. Asimismo, los fondos para la promoción de energías renovables y la eficiencia energética cayeron un 66,4% en términos reales.