Las montañas de residuos arrastrados por la rotura del depósito minero de Vale en Brumadinho (Brasil) dificulta la recuperación de víctimas, que se eleva a 142 muertos y 194 desaparecidos, según el último informe de Defensa Civil.
En las labores de búsqueda este martes participan unos 400 hombres, entre bomberos, soldados del ejército y voluntarios, que realizaron exploraciones en 22 puntos de la región afectada por la tragedia con la ayuda de 10 helicópteros y apoyados por embarcaciones y máquinas excavadoras.
La tragedia ocurrió cuando una de las presas donde se almacenaban residuos minerales de un complejo del gigante minero brasileño Vale en Brumadinho, municipio de Minas Gerais (sudeste de Brasil), se rompió y generó un alud que sepultó las instalaciones de la propia compañía y cientos de propiedades rurales.
Los trabajos de recuperación de víctimas son complejos y lentos por la complejidad del terreno y la montaña de residuos, que en algunas zonas llegó a los 20 metros de altura.