Los glaciares no son del Estado, ni de los chilenos; los glaciares no son de nadie. Esta frase, que menciona el aviso a página completa que publicó hoy el prestigioso medio norteamericano The New York Times, es el argumento que utilizó Greenpeace para fundar una nueva República sobre los glaciares que existen en el territorio chileno. La organización ambientalista busca una ley que garantice la protección de los glaciares, que permita cuidar estas reservas de agua estratégicas para el país y sus futuras generaciones.
“República Glaciar nace porque en Chile existe un vacío en la legislación que no reconoce estas enormes masas de hielo como parte de su soberanía. Ni en la Constitución, ni en el Código de Aguas existe mención a los glaciares como bien público que debe protegerse activamente”. Explica Matías Asún, Director de Greenpeace en Chile.
Los glaciares en Chile abarcan una superficie de aproximadamente 23.000km2, los que equivale al 82% de los glaciares que existen en Sudamérica. Estos hielos milenarios son las principales reservas de agua del país y contribuyen a la cuenca de los ríos y a la vida en gran parte del territorio.
“El limbo legal en que se encuentran los glaciares en Chile, nos permitió fundar República Glaciar, una nación donde todos los chilenos pueden ser sus ciudadanos para proteger estas reservas naturales de agua. Chile es unos de los pocos países que no contempla una ley de protección de glaciares, esto ha permitido que la minería se trasforme en su principal amenaza.” enfatiza Asún.
El proyecto Pascua Lama es conocido por destruir glaciares. Pero hoy aparece un peligro aún mayor: el proyecto de expansión Andina 244 de la estatal Codelco, que contempla la destrucción de 5.000 hectáreas de glaciares, afectando directamente las reservas de agua de toda la zona central de Chile (1). Por eso es urgente contar con una ley de protección de glaciares.
“La fundación de República Glaciar es real y se basa en la Convención de Montevideo (2). Nuestros activistas han estado habitando distintos glaciares en el país y ya hemos proclamado nuestra fundación como república soberana y pacífica. Muy pronto abriremos embajadas en Chile y el mundo y estaremos invitando a más personas a que se hagan ciudadanos de República Glaciar” asegura el director de la oficina chilena de la organización.
Greenpeace busca con esta acción que el Estado chileno reconozca los glaciares como un bien público, se comprometa con su protección a través de una ley y evite cualquier amenaza que los afecte. “Cuando eso ocurra, República Glaciar y sus ciudadanos, devolverán los glaciares al Estado de Chile”, concluye el Director de la organización.