Cómo se forman los volcanes: explicación fácil para entender por qué surgen

Más leídas

Lo primero que debemos tener claro es que los volcanes son las estructuras geológicas por las que el magma es capaz de ascender a la superficie terrestre desde el interior de la Tierra. Por lo general encontramos volcanes en las limitaciones de placas tectónicas, en los lugares donde estas se mueven. Sin embargo, también podemos encontrar volcanes en zonas calientes donde no existe movimiento alguno entre placas tectónicas.

En este artículo descubrirás cómo los volcanes conectan el interior con el exterior de la Tierra, también a través de los fondos marinos. Igualmente, qué tipos de volcanes hay, por qué entran en erupción y los tipos de erupciones que existen.

¿Cómo se forma un volcán?

En realidad, un volcán es una apertura o una ruptura en la corteza terrestre por la que el interior de la Tierra expulsa magma, cenizas volcánicas, gases y rocas fundidas en forma de lava a elevadísimas temperaturas. Por lo general, los volcanes se forman cerca de los bordes de las placas tectónicas a través de diferentes procesos. De un lado tenemos los volcanes explosivos, que son volcanes que se forman cuando una placa densa oceánica subduce (subducción) a una placa fina continental. De otro lado, los volcanes efusivos, que son volcanes formados como consecuencia de la separación de las placas tectónicas, una separación que permite que el magma ascienda gracias a las corrientes de convección. Por último, los volcanes de punto caliente son aquellos que se forman sobre puntos calientes capaces de romper la corteza terrestre y hacer que ascienda el magma desde el fondo marino para formar superficie terrestre (este sería el caso de Hawái).

Los volcanes difieren entre sí dependiendo de las características que llevaron a su formación. Dentro de estas características singulares encontramos elementos como por ejemplo la ubicación. Sin embargo, existen elementos comunes a todos ellos: altas temperaturas capaces de formar magma; que este pueda elevarse al exterior de la corteza y salir por aperturas o cráteres. Una vez expulsado, los materiales piroclásticos se acumulan en la superficie, formando lo que se denomina «cono volcánico».

Partes principales de un volcán

Los volcanes comparten elementos que son comunes a todos, en todas partes. El primero de dichos elementos es la chimenea, por donde asciende el magma hasta alcanzar el cráter. El segundo es el cráter, que es una depresión con paredes situada en lo más alto del volcán. El tercero, que no es común a todos, es la caldera, una gran depresión formada durante el proceso de erupción. El cuarto, denominado cono secundario, es el resultado de la emisión de magma por conductos secundarios (fisuras en los flancos del volcán). El quinto elemento es la fumarola, cuya función es emitir gas y no magma. Por último, la cámara de magma, que es donde se concentra el magma en el interior de la tierra antes de ser expulsado a la superficie. También podríamos considerar la propia lava como un elemento común, cuya función es contribuir, junto con rocas y cenizas, a la formación de otros elementos como el cono volcánico.

Tipos de volcanes

La forma convencional para clasificar los diferentes volcanes es por su tipo de actividad:

Volcanes activos: aquellos que podrían entrar en erupción en cualquier momento.
Volcanes inactivos: aquellos que muestran signos de actividad o que han estado inactivos durante mucho tiempo entre dos erupciones. Por lo general hablamos de siglos de inactividad.
Volcanes extintos: aquellos que llevan miles de años sin entrar en erupción. Sin embargo, a pesar de su nombre, estos volcanes podrían llegar a entrar erupción en algún momento del futuro.

Otra forma de clasificar volcanes es dependiendo del tipo de erupción volcánica:

  • Erupción hawaiana: la lava es expulsada por el cráter o algunas grietas presentes. Su lava es basáltica, por lo que no contiene excesivo gas.
  • Erupción islandesa: la erupción tiene lugar en grietas que surgen en relieves planos. La lava es muy fluida y queda depositada de manera horizontal.
  • Erupción estromboliana: las erupciones en estos tipos de volcanes se intercalan con momentos de calma.
  • Erupción de peleana: son volcanes con erupciones muy violentas. Esto es resultado de la solidificación del magma, que es muy viscoso, en la chimenea del volcán. Ello lleva a generar un tapón de magma que aumenta la presión hasta que se desencadena una explosión de grandes dimensiones.
  • Erupción pliniana: los volcanes con este tipo de erupción se caracterizan por expulsar grandes cantidades de gas y lanzar rocas a más de 20 km del cráter.
  • Erupción vulcaniana: en esta tipología el agua interactúa con el agua, lo que provoca la creación de grandes cantidades de vapor y cenizas.

¿Cómo se produce una erupción volcánica?

La erupción es la principal característica que utilizamos para clasificar y estudiar volcanes. Conocemos tres mecanismos:

  • Erupción magmática: se libera el gas contenido en el magma, lo que provoca una descompresión, lo que provoca una disminución de la densidad. Así es como sube el magma a la superficie terrestre.
  • Erupción freatomagmática: el magma es enfriado al entrar en contacto con agua, lo que provoca la explosión y escisión del mismo.
  • Erupción freática: en contacto con el magma, el agua se evapora y expulsa todo tipo de materiales contenidos en el magma.

Al hablar de erupciones, una de las principales preguntas que nos viene a la mente es: ¿Cuáles son los volcanes más activos del mundo y dónde estánm situados.

¿Cuál es el volcán activo más grande del mundo?

Actualmente, el volcán hawaiano Mauna Loa, con sus 75.000 km³, es el volcán activo más grande del mundo.

Últimas noticias

Estudian en Chubut a tres especies clave para el ecosistema marino del país

Científicos estudian en Chubut a tres especies clave para el ecosistema marino del país. Entérate de que especies se trata.