Una campaña promovida por organizaciones socioambientales de Baradero en conjunto con docentes y familias de escuelas rurales de ese distrito envió a analizar muestras de orinas de niños y niñas cuyo resultado reveló la presencia de glifosato.
La docente e integrante de Acción Ambiental, Paola Kruger, advirtió sobre la falta de una legislación que regule las fumigaciones en el distrito. Explicó que “a partir de una campaña impulsada por un conjunto de organizaciones ambientalistas “llevamos ocho muestras de orina al laboratorio Fares Taie de Mar del Plata y el 40% dieron que había Glifosato y AMPA (metabolito aminofosfonato ácido aminometilfosfónico), tanto en docentes como de los alumnos”.
En una entrevista en radio Provincia, consideró que esto “demuestra que en las fumigaciones existen derivas porque los docentes no vivimos en el área rural”. Agregó que “nuestra escuela está rodeada de campo, ubicada a 20 km del casco urbano” y ésta “es una realidad que se repite en muchas escuelas”.
Sobre la legislación para detener las fumigaciones en cercanías a los establecimientos educativos, Kruger señaló que “la Red Local de Estudios Agroecológicos Baradero-San Pedro presentó un proyecto de ordenanza y ha realizado varias denuncias porque nos han fumigado en el recreo, cuando llegaban los chicos a la escuela, con casos de intoxicación aguda, y al no haber una ordenanza, no hay nada que pueda sancionar esta situación”.
Por otro lado, destacó que “la Sociedad Rural también presentó un proyecto donde el mayor conflicto fue el metraje de las zonas de exclusión de la fumigación. Ellos pedían 25 metros, cuando sabemos que a esa distancia el veneno llega. Nosotros pedimos 500 metros, pero con una progresión para que poder ir extendiendo esa zona con un cambio en la forma de producir”.
En tanto, informó que la municipalidad de Baradero “llamó a una mesa de trabajo para llegar a un acuerdo” y ahora “a raíz del resultado de los análisis de orina, presentó un borrador del proyecto que van a enviar al Concejo Deliberante”.
Sin embargo, aclaró que “no estamos de acuerdo porque no tiene en cuenta la salud: proponen 250 metros de exclusión más 50 metros de zona de amortiguación. Pero ahí se puede fumigar y los resultados de los análisis de orina justo son alrededor de un campo que está a casi 1000 metros de la escuela y llega”.