Un nuevo estudio da muestra de las negativas repercusiones del cambio climático en toda América Central, entre ellas, sus efectos adversos sobre la agricultura y los ecosistemas.
Se trata de la primera investigación que al mismo tiempo plantea los desafíos actuales a los que se enfrenta la región e identifica las estrategias políticas que podrían contribuir a optimizar la adaptación regional.
Entre las principales conclusiones de la investigación destacan:
● El cambio climático acarreará severas consecuencias en la hidrología y disponibilidad de recursos hídricos en la región.
● Se prevén reducciones de bosques tropicales húmedos en América Central debido al cambio climático, siendo reemplazadas algunas áreas por sabanas y praderas.
● La idoneidad de zonas para cultivar café en Nicaragua se desplazará aproximadamente 300 metros más hacia arriba, lo que puede incrementar la presión sobre bosques y recursos naturales situados en altitudes superiores.
● Las áreas prioritarias para conservación de la biodiversidad probablemente cambiarán en función del cambio climático, requiriéndose cuidadosa planificación y actualización de zonas protegidas.
● Conservar y restaurar áreas forestales será fundamental para mantener las poblaciones de abejas y otros polinizadores.