La crisis climática está llevando al planeta al borde de múltiples puntos de inflexión o de no retorno climáticos que están resultando “desastrosos” para sus ecosistemas, puesto que marcan esa frontera en la que la degradación se hace irreversible: no tiene vuelta atrás. Un nuevo estudio científico señala que cinco de los 16 puntos de inflexión que han sido identificados pueden haber empezado a ser sobrepasados debido a un calentamiento mundial por encima de 1,1ºC que ha sufrido ya la humanidad.
En este grupo de los cinco puntos de no retorno que se habrían iniciado de manera irreversible (al rebasarse el umbral de los 1,1ºC, según este trabajo) están los deshielos de la capas heladas de Groenlandia y del oeste de la Antártida (que contribuyen a las subidas del nivel del mar); la muerte de los corales tropicales; el derretimiento abrupto del permafrost (suelo helado) en las tierras polares, rico en carbono, y el colapso de la corriente marina del Mar de Labrador. Incluso, podría haberse iniciado ese proceso de alteración irreversible en la corriente de Atlántico (aunque la mejor estimación apunta que su activación se daría en el momento en que se den aumentos de 4 ºC).
El sexto informe de evaluación del Grupo Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU, cuya última parte se hizo pública el pasado mes de abril, alertaba de un riesgo “alto” de que se dieran puntos de no retorno a partir de los 2 ºC de aumento de temperatura, y del “muy alto” una vez superados los 2,5 ºC.
Sin embargo, el nuevo estudio apunta que, con el nivel de calentamiento actual (1,1 ºC), es posible que la Tierra ya haya abandonado el estado climático “seguro” y que se hayan activado esos cinco “tipping points”, de los 16 evaluados.
Más a partir de 1,5 ºC
No obstante, adicionalmente, con un calentamiento que supere los 1,5 °C , otros puntos de inflexión serían atravesados: la pérdida de hielo en el Mar de Barents y la pérdida de hielos de las montañas, en primer lugar, mientras que a partir de la subida de 2 ºC y 3ºC ese proceso se hace más probable para los cambios en el monzón en el oeste de África, el colapso de los glaciares en el Este de la Antártida y la muerte de los bosques tropicales de la Amazonia.
En total, los investigadores encontraron evidencia de 16 puntos de inflexión, con un escalafón que hacen que otros ecosistemas entren en riesgo de una degradación irreversible a medida que active un calentamiento global de al menos 2 °C. Los puntos de inflexión tendrían efecto en escalas de tiempo que varían desde unos pocos años hasta siglos.
Un lugar menos seguro
“Nuestra evaluación proporciona pruebas científicas sólidas para tomar medidas urgentes para mitigar el cambio climático”, señalan los autores en las conclusiones.
“Mostramos que, incluso, el objetivo del acuerdo de París de limitar el calentamiento a muy por debajo de 2 °C y preferiblemente a 1,5 °C no es seguro, mientras que una subida de 1,5 °C y por encima nos enfrenta al riesgo de cruzar múltiples puntos de inflexión”, señalan los autores del estudio. Para ellos, “cruzar estos puntos de no retorno puede generar retroalimentaciones positivas que aumentan la probabilidad de cruzar otros punto de no retorno”.
“La Tierra puede haber dejado de tener un estado climático seguro más allá del calentamiento mundial por encima de la subida de 1 ºC”, concluyeron los investigadores, quienes argumentan que toda la civilización humana se desarrolló en temperaturas por debajo de este nivel.
Una frontera peligrosa
“El mundo se dirige hacia un aumento de 2 ºC a 3 ºC grados de calentamiento global. Esto sitúa a la Tierra en el camino para cruzar múltiples puntos de inflexión peligrosos que serán desastrosos para las personas en todo el mundo. Para mantener condiciones habitables en la Tierra y permitir sociedades estables debemos hacer todo lo posible para evitar cruzar los puntos de inflexión”, señala el Johan Rockström, director del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático, que formó parte del equipo de estudio.
El David Armstrong McKay de la Universidad de Exeter, autor principal del estudio, dijo: “Es realmente preocupante. Hay motivos para el dolor, pero también hay motivos para la esperanza”.
La importancia del acuerdo de París
Los autores de este trabajo respaldan de esta manera el por qué es tan importante el objetivo establecido en el acuerdo de París (no rebasar el aumento de 1,5ºC, como primera meta) y la necesidad de seguir batallando para hacerlo posible.
Su argumento es que cada fracción de calentamiento que sea evitada reduce la probabilidad de alcanzar nuevos puntos de inflexión.
Recientes investigaciones han mostrado signos de desestabilización en la selva amazónica, cuya pérdida tendría implicaciones “profundas” para el clima global y la biodiversidad, así como para la capa de hielo de Groenlandia y las corrientes de la Corriente del Golfo.
Una evaluación de estudios previos
El análisis, publicado en la revista Science, evaluó más de 200 estudios previos sobre puntos de inflexión anteriores, observaciones climáticas y estudios de modelación.
Un punto de inflexión es aquel en el que se supera un umbral de temperatura, lo que lleva aparejado un cambio imparable o irreversible que incide en un sistema climático, incluso si se lograr parar el calentamiento mundial provocada por las actividades del hombre.
La evaluación del punto de inflexión del Amazonas no incluyó los efectos de la deforestación. “La combinación del calentamiento y la deforestación podría traer eso mucho antes”, dijo Armstrong McKay.
Otros puntos de inflexión potenciales que aún se están estudiando incluyen la pérdida de oxígeno del océano y los cambios importantes en el monzón del verano indio.
El profesor Niklas Boers, de la Universidad Técnica de Munich, dijo: “La revisión es una actualización oportuna sobre los posibles elementos de inflexión de la Tierra, y la amenaza de eventos de inflexión bajo un mayor calentamiento es real”.
Agregó que se necesitaba mucha más investigación para reducir los umbrales de temperatura críticos, y que las estimaciones actuales siguen siendo muy inciertas.
Los puntos de inflexión, una indagación nueva
El profesor Thomas Stocker, de la Universidad de Berna, dijo: “La ciencia sobre los puntos de inflexión está lejos de terminar, apenas ha comenzado, y se necesitan modelos mucho mejores para abordar la cuestión sobre qué nivel de calentamiento es crítico para qué punto de inflexión .”
En mayo, el gobierno suizo propuso un informe especial del IPCC sobre los puntos de inflexión climáticos.
El profesor Tim Lenton de la Universidad de Exeter, coautor del análisis, dijo: “Desde que evalué por primera vez los puntos de inflexión en 2008, la lista ha crecido y nuestra evaluación del riesgo que representan ha aumentado drásticamente.
“Nuestro nuevo trabajo proporciona evidencia convincente de que el mundo debe acelerar radicalmente la descarbonización de la economía. Para lograrlo, necesitamos desencadenar puntos de inflexión social positivos”.
Actualmente, el mundo se dirige hacia ~2 ºC a 3 °C de calentamiento global; en el mejor de los casos, si se implementan todas las promesas de cero emisiones netas y las contribuciones determinadas a nivel nacional, podría situarse justo por debajo de los 2 °C. “Esto reduciría un poco los riesgos del punto de inflexión, pero aún sería peligroso, ya que podría desencadenar múltiples puntos de inflexión climáticos”, añaden en las conclusiones.