Las quemas en vastas zonas forestales de Bolivia se triplicaron en las últimas dos semanas y ya afectan a más de 850.000 hectáreas, al tiempo que ingresaron a áreas protegidas y a dos parques nacionales, informó hoy la agencia de noticias AFP.
Los incendios provocados en reservas forestales, en predios agropecuarios y en inmensos pastizales del territorio boliviano afectaron a más de 850.000 hectáreas, casi el triple de lo reportado hace dos semanas, amplia un informe divulgado este domingo por el Gobierno.
“Hasta el 10 de septiembre de este año, en el país se han quemado 854.724 hectáreas”, indicó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, entrevistado por una red de medios estatales de difusión.
Aunque los incendios están por ahora controlados, agregó que hay preocupación por el fuego “que está afectando a parte de dos parques nacionales“.
Se trata del Parque Nacional Noel Kempff Mercado, con unas 541.200 hectáreas, y del Parque Amboró, de unas 636.000 hectáreas, ambos muy ricos en flora y fauna.
La autoridad gubernamental explicó que, pese al incremento en las últimas dos semanas, “hay una reducción considerable de incendios provocados, en relación a años anteriores”
El plan del Gobierno es que en todo el año la destrucción de bosques, pastizales y predios agropecuarios no “superen los 1,5 millones de hectáreas”, aseguró Calvimontes.
El titular de Defensa Civil recordó que, ya en 2019, Bolivia registró la quema de 3,5 millones de hectáreas, que en 2020 se extendió a 5,2 millones y que en 2021 bajó a 4,2 millones de hectáreas, según datos actualizados del Gobierno.
Los incendios de este año se registran en los departamentos de Santa Cruz (este), Beni (noreste), Tarija (sur) y Chuquisaca (sureste).
Según la información oficial, a la fecha hay 14 incendios activos de magnitud en el país, donde se continúa trabajando con equipos aéreos para controlar y apagar las llamas, concluyó AFP.