Humala recibió a Morales en el Palacio de Gobierno de Lima, en el marco de la visita que el gobernante boliviano hizo a Perú para participar en la cumbre del cambio climático de Naciones Unidas (COP20).
Durante el encuentro bilateral, los mandatarios también trataron temas como la integración de infraestructura y a través del puerto sureño de Ilo, que Perú ha ofrecido, sin soberanía, para el uso boliviano, aunque todavía está pendiente de aprobación por el Congreso peruano.
Según la Secretaría de Prensa presidencial, durante el encuentro, celebrado en privado, se comentó que el narcotráfico, la minería ilegal, el contrabando, la deforestación, la contaminación y la trata de personas ‘son delitos que deben ser combatidos tanto en el nivel nacional como en el bilateral’.
Asimismo, se remarcó que la zona fronteriza entre Perú y Bolivia está expuesta a dos factores originados por la acción humana que degradan su medioambiente: el crecimiento explosivo de las ciudades (sobre todo las peruanas Juliaca y Puno y la boliviana El Alto) y la minería informal e ilegal de oro (en las cuencas de los ríos Ramis y Suches).
‘Estos inciden directamente en la contaminación del agua y la tierra y representan un alto riesgo para la población y un directo perjuicio a sus actividades agropecuarias’, indicó la información oficial.
En el encuentro se destacó, además, que Bolivia es una de las plazas más importantes para las inversiones peruanas en el extranjero, ya que Perú es el sexto país con mayor inversión directa en ese país.
Tras su presentación de este martes en la COP20, Morales había anunciado que se iba a reunir con Humala y remarcó que Perú y Bolivia son ‘dos países hermanos y tenemos la obligación de entendernos’.
En una multitudinaria rueda de prensa celebrada tras su intervención en la ceremonia inaugural de la reunión de alto nivel de la COP20, Morales abogó por ‘acabar con el capitalismo’ si los países ‘quieren demostrar que de verdad pretenden luchar, a nivel global, contra el cambio climático’.
El presidente boliviano dijo que los países llevan ‘treinta años de negociaciones climáticas y el calentamiento sigue avanzando porque a los países capitalistas les importa más la plata que la vida’.