Mar Báltico: las algas siguen contaminadas por el accidente de Chernóbil de 1986, según un estudio

Más leídas
El Centro Nacional de Aceleradores (CNA, Universidad de Sevilla-Junta de Andalucía-CSIC), en Sevilla, colabora con el laboratorio de medio ambiente marino de la Organización Internacional de la Energía Atómica (IAEA), en Mónaco. Este laboratorio distribuye muestras afectadas por diversas fuentes de contaminación radiactiva entre diferentes centros para que estudien la presencia de  radionucleidos mediante técnicas radiométricas o de espectrometría de masas. 

 
En este contexto, un trabajo desarrollado por los miembros del grupo de Espectrometría de Masas con Aceleradores del CNA analizó los niveles de plutonio Pu-239 y Pu-240 y yodo I-129 en algas procedentes del mar Báltico. Los investigadores confirmaron los niveles elevados de radionucleidos antropogénicos debidos al impacto del accidente de Chernóbil en 1986 y las descargas de radionucleidos desde la planta de reprocesamiento de Sellafield (Reino Unido).
 
De este modo se obtuvo un estudio estadístico de los resultados, estableciendo valores de referencia para las algas.
 
La determinación exacta y precisa de las concentraciones de radionucleidos en muestras marinas es importante para las evaluaciones de radiactividad marina y para el estudio de procesos oceanográficos.
 
Los resultados obtenidos permiten certificar los distintos materiales empleados para diversos radioisótopos y que posteriormente serán empleados para controles de calidad que validan los métodos empleados en su medida. Según indica la doctora Elena Chamizo Calvo, “en el CNA analizamos diferentes muestras proporcionadas por la IAEA que se encuentran en proceso de certificación”.
Últimas noticias

Cuenta regresiva para que Nalá sea liberada en El Impenetrable

Descubre la historia de Nalá, una yaguareté nacida en cautiverio en El Impenetrable, que pronto conocerá la vida en libertad.