Todas las playas de Barcelona serán libres de humo. Con la entrada en vigor de la nueva norma, queda prohibido fumar en las 10 playas de la capital catalana durante todo el año, excepto en los chiringuitos.
La medida homogeniza así la normativa de todas las playas de la Ciudad Condal y supondrá que encenderse un cigarrillo en la arena pueda ser multado con 30 euros.
El Ayuntamiento ya realizó una prueba piloto el año pasado en cuatro playas de la ciudad y se ha conseguido reducir la presencia de fumadores en las playas un 3%.
Se trata no solo de una cuestión de respeto hacia los otros bañistas, sino también de protección del medio ambiente, puesto que una colilla tarda en degradarse más de una década.