Un estudio confirmó que el ciclo del agua de nuestro planeta incluye el interior de la Tierra. En el marco de un estudio sobre un diamante se supo que el agua acompaña a las losas en subducción y entra en la zona de transición del planeta. Se trata de la confirmación de una idea que por mucho tiempo no pudo superar la categoría de teoría.
En el estudio participa el Instituto de Geociencias de la Universidad Goethe de Fráncfort. El equipo de científicos analizando un raro diamante formado a 660 metros debajo de la superficie de la Tierra. De esta forma terminaron descubriendo que la zona de transición entre el manto superior e inferior de la Tierra contiene cantidades considerables de agua.
¿Qué es la zona de transición?
Es el nombre de la capa que separa el manto superior y el manto inferior de la Tierra. Se encuentra a una profundidad de 410 a 660 kilómetros. El 70% del manto superior está compuesta por el mineral olivino. En el límite superior de la zona de transición, a unos 410 kilómetros de profundidad, se convierte en wadsleyita, por la presión. Y, a 520 kilómetros, se transforma en ringwoodita.
¿Cómo se realizó este descubrimiento?
El equipo de investigación analizó un diamante de Botsuana, África. Se formó a una profundidad de 660 kilómetros, justo en la interfaz entre la zona de transición y el manto inferior, donde la ringwoodita es el mineral predominante. Los diamantes de esta región son muy raros, incluso entre los raros diamantes de origen superprofundo, que representan sólo el 1% de los diamantes.
Los análisis revelaron que la piedra contiene numerosas inclusiones de ringwoodita, que presentan un alto contenido de agua. Además, el grupo de investigación pudo determinar la composición química de la piedra. Resultó que era casi exactamente la misma que la de prácticamente todos los fragmentos de roca del manto encontrados en los basaltos de cualquier parte del mundo. Esto demostró que el diamante procedía definitivamente de un trozo normal del manto terrestre.
De esta forma, gracias a este estudio, se demostró que la zona de transición contiene cantidades considerables de agua. Ya en 2014 se detectó por primera vez la presencia de ringwoodita hidrosa en un diamante de la zona de transición. Sin embargo, en ese caso no fue posible determinar la composición química precisa de la piedra porque ser demasiado chica.