Los Esteros del Iberá se recuperan de los incendios ocurridos entre los meses de febrero y marzo, que dejaron imágenes desoladoras de la flora y fauna. Corrientes recibió las lluvias y con ellas la naturaleza revivió, permitiendo que las especies de animales vuelvan a estar rodeados de pasto, agua y alimento.
Casi un millón de hectáreas fueron afectadas en Corrientes por los incendios: una cifra que equivale al 11% del territorio de la provincia y el 13% del Parque Provincial Esteros del Iberá se vio arrasado por las llamas. Las imágenes que circulaban durante los días de infierno que vivió la vecina provincia, eran devastadoras, reflejando uno de los desastres naturales más grandes de los últimos años.
A pesar del fuego, que hizo arder al diez por ciento de la superficie de Corrientes, la flora del lugar comienza a asomar entre la tierra chamuscada. Las especies autóctonas lograron ser rescatadas. Y la naturaleza comienza a equilibrarse. Así lo reflejan las imágenes tomadas este fin de semana en los esteros, a pocos kilómetros de Portal Galarza y en la zona de Carlos Pellegrini.
En la siguiente comparación, se ve a un siervo en medio del campo. La primera imagen es del último fin de semana y la siguiente es una de las fotografías que circulaba durante los días más drásticos de los incendios en Corrientes.
La otra imagen que se ve se volvió conocida, ya que eran dos bomberos de Córdoba -que llegaron a Corrientes para ayudar en la lucha contra el fuego- y que estaban hidratando a un carpincho que escaba de las llamas. En la otra imagen se ve a un carpincho disfrutando, como más les gusta, en una laguna de agua fresca.
El verde se apodera del lugar, el agua refleja el cielo azul y sus animales autóctonos se dejan ver mientras vuelven a estar en contacto con su hábitat natural. Si bien las pérdidas para la provincia fueron millonarias y la recuperación total no llegará en años, ver imágenes de una naturaleza viva es sin dudas el empujón que necesitaban los correntinos.
A menos de dos meses de la finalización de los dramáticos incendios, los Esteros del Iberá, exhiben un reverdecer. El retorno de las lluvias devolvió la vida a las zonas arrasadas por las llamas y la naturaleza muestra, una vez más, su capacidad de resiliencia.
Semana Santa en los Esteros del Iberá
Los Esteros del Iberá, que muestran una asombrosa recuperación de la mano de las lluvias, tuvo reservas cerca del 90% de sus plazas en el portal Pellegrini. Previo a esta fecha, el gobierno provincial, a través del Ministerio de Turismo había lanzado una campaña denominada “Renacer Iberá”, que busca recomponer la infraestructura turística, trabajando en apoyo a los distintos operadores y emprendedores de Corrientes vinculados a Iberá, con fondos provinciales y del Ministerio de Turismo y Deportes que está trabajando con un esquema de APTur (Fondo de Ayuda a los Prestadores Turísticos).
Todos los portales que se vieron obligados a cerrar, después de quedar afectada el 23% de la superficie total del Parque Iberá -en sus dos jurisdicciones, nacional y provincial-, y este fin de semana volvieron a estar operativos trabajando frente a una rápida recuperación de la fauna y la flora.
Colonia Pellegrini es la localidad más popular. Pero también existen otros portales de acceso al Parque como Ituzaingó, Galarza, San Miguel y Concepción de Yaguareté Corá.
Los Esteros del Iberá abarcan 1.300.000 hectáreas en el centro norte de la provincia de Corrientes y le dan nombre a toda una ecorregión del noreste argentino. Es uno de los humedales más extensos del continente y entre los más diversos del planeta cálido. Constituyen un sistema de esteros, bañados, embalsados, espejos y cursos de agua interconectados entre sí y, a su vez, separados por alargadas lomadas arenosas, donde crecen mogotes de bosques higrófilos y extensos pastizales. Esta gran variedad de ambientes hace que la región tenga una increíble biodiversidad y muchas especies endémicas o exclusivas.