El informe incrementa la probabilidad de que el cambio climático sea fundamentalmente un problema de origen humano al 95%, con respecto al estudio anterior de 2007 que establecía una probabilidad del 90%. Además, los científicos de la ONU predicen un aumento de olas de calor, sequías, inundaciones e incrementos del nivel del mar si no se toman medidas eficaces para reducir las emisiones de los gases contaminantes que provocan el efecto invernadero.
En concreto, según los expertos del IPCC, el nivel del mar podría subir entre 26 y 82 centímetros a finales de siglo, una horquilla mayor que la apuntada en 2007, cuando se hablaba de una subida de entre 18 y 59 centímetros.
Considera que una reducción rápida de los gases de efecto invernadero ayudará al mundo a evitar lo peor del cambio climático, pero sin unas estrategias de mitigación agresivas, la temperatura global subirá y probablemente superará los 2ºC de aumento en 2100. Las proyecciones se basan en escenarios posibles que tienen que ver con lo que reducirán o no los distintos países. El escenario más optimista prevé que la temperatura de la Tierra sólo aumente 0,3°C y el más pesimista que suba hasta 4,8°.
Destaca además algunas conclusiones importantes que se extraen del análisis de casi 10.000 publicaciones científicas producidas en los últimos seis años: el aumento del nivel del mar se ha acelerado, la tasa de deshielo del Ártico se ha duplicado, los glaciares y los casquetes polares se funden a una velocidad mayor y los océanos se están acidificando.