El gerente de Evaluaciones Ambientales de la Contraloría General del Estado, Roberto Pérez, informó ayer que la auditoría ambiental que realizó esa institución estatal identificó rastros negativos de contaminación hídrica en la cuenca del río La Paz.
“Los resultados de la auditoría ambiental han mostrado un ecosistema dañado, cuerpos de agua que están considerablemente contaminados por efecto de la actividad humana, cuya manifestación se ha advertido en consecuencias reales y riesgos potenciales importantes para la salud pública”, manifestó.
Según Pérez, la valoración físico-química realizada a los cuerpos de la cuenca del río La Paz determinó que la calidad del recurso hídrico varía en las diferentes áreas.
“El continuo vertido de aguas residuales contaminadas crean esa situación e impiden la autorecuperación del río para que alcance los niveles necesarios de calidad, que lo hagan apto para el riego de áreas agrícolas”.
La valoración microbiológica realizada en el río La Paz determinó que existe una importante contaminación de bacterias y parásitos en sus aguas. La presencia de esos microorganismos compromete la salud de los agricultores.