Aunque el proyecto recién da sus primeros pasos, desde hace dos años unos 25.000 hogares de la provincia de Buenos Aires y la ciudad cuentan con electricidad gracias a la generación de energía a partir de la basura.
En el Complejo Norte III, en Campo de Mayo, las centrales eléctricas San Miguel y San Martín son alimentadas por biogás.
‘A diferencia de Oslo, en Buenos Aires está prohibida por ahora la incineración, así que trabajamos con el biogás que produce la basura enterrada en el relleno sanitario. Nuestras plantas generan unos 18 MW que entregamos a Enarsa por una red de ocho kilómetros de electroducto’, explicó el ingeniero Marcelo Rosso, gerente de Nuevas Tecnologías de la Ceamse.
El comunero Jorge Orovitz Sanmartino, que en 2012 inició en la Comuna 7 (Parque Chacabuco y Flores) la llamada ‘Red de puntos verdes’ para que la gente lleve sus desechos reciclables, hace una ecuación de sentido común: ‘Es mucho más redituable y económico reciclar el papel para obtener papel, que tener que procesarlo para generar energía’.
Por eso dice que ‘la meta debe ser generar menos basura, reutilizar, reciclar, hacer compost y generar conciencia sobre los residuos’.
Fuente: Diario La Nación