Roland Geyer es profesor alemán de ecología industrial de la Universidad de California en Santa Bárbara, Estados Unidos. Lideró un equipo de científicos que calculó por primera vez la cantidad de plástico acumulado desde los comienzos de su producción industrial.
El resultado fue dramático: 8.500 millones de toneladas de plástico producido desde la década del cincuenta. ‘Es una enorme cantidad de material que no se biodegrada. Estoy muy preocupado’, afirmó Geyer.
Para darle sentido de situación a una problemática que se confunde entre números estratosféricos sin contraste real con escenarios empíricos, al responsable de la investigación se le ocurrió un parámetro: ‘Hay suficientes restos de plástico en el mundo para cubrir un país entero del tamaño de Argentina’.
La explicación de Geyer promete dar claridad a un fenómeno desbordante. ‘Nos dirigimos rápidamente hacia un ‘planeta de plástico’, y si no queremos vivir en ese tipo de mundo, tal vez tengamos que repensar la forma en que usamos algunos materiales’, advirtió Geyer.
En su informe, el primer gran análisis global de plástico producido en masa, develó que casi el 80% del material fabricado fue descartado y convive en la naturaleza, mimetizado con el medio ambiente, entre los océanos y los basureros: un estimativo de 6.500 millones de toneladas de un material que no es biodegradable.