El ejemplar bautizado como “Quilletequiam”, regresa como al suelo puntano luego de haber sido de gran utilidad para su especie. Será trasladado al Centro de Conservación de Vida Silvestre.
El estudio resalta que la mayor amenaza para esta ave son las tradiciones que se siguen celebrando a pesar de que el mundo, hoy, es un escenario distinto.