El acuerdo sobre el clima alcanzado por 195 países el pasado sábado en París es una gran noticia. Entre los objetivos que se han fijado la mayor parte de los gobiernos mundiales, figura el aumentar los flujos financieros para conseguir un desarrollo bajo en emisiones de gases de efecto invernadero, lo que sin duda acelerará la transformación del sector energético y supondrá que las inversiones en renovables se multipliquen.
Más de 70 países se han marcado objetivos específicos de potencia eólica a instalar en los próximos años. Entre ellos están desde países tan relevantes como China hasta pequeños como Burkina Faso.
El acuerdo será bueno para el medioambiente y para la economía. La eólica es la tecnología que resulta más barato instalar hoy en día, por lo que está llamada a jugar un papel fundamental en esta transición energética.